¿Cómo se produce la inflamación en las vías respiratorias?
Cuando los bronquios están expuestos a factores externos, envían una señal de alerta a los vasos sanguíneos para recibir auxilio. En respuesta, los vasos sanguíneos aumentan el flujo de sangre al área afectada, llevando sustancias que combaten la infección, como anticuerpos y células del sistema inmunitario, y nutrientes esenciales para la reparación, como grasas y proteínas.
Para permitir el paso de todas estas sustancias, que llegan acompañadas de líquido al área afectada, las uniones entre las células de los vasos sanguíneos se separan, resultando en una hinchazón del área o inflamación. En las condiciones respiratorias, esta inflamación ocurre dentro de las vías respiratorias de los pulmones, es decir, en los bronquios y bronquiolos. Esto reduce el espacio dentro de estas vías, causando problemas en la entrada y salida de aire de los pulmones.
Síntomas y consecuencias de la inflamación respiratoria
La inflamación en las vías respiratorias puede producir varios síntomas en los niños, incluyendo:
- Tos seca y persistente: A menudo, peor en la noche y puede llegar a causar vómito.
- Respiraciones rápidas y superficiales: Intento de compensar por el poco espacio disponible para el paso de aire, lo que aumenta la cantidad de aire que llega a los pulmones.
- Sibilancias o silbidos al respirar: Especialmente durante la exhalación.
Dependiendo de la severidad de la inflamación, los niños pueden llegar a desarrollar dificultad respiratoria, un síntoma común en condiciones como el asma y la bronquiolitis. Es crucial estar atentos a cómo respiran nuestros hijos cuando presentan condiciones respiratorias y tomar acción de inmediato.
¿Cómo podemos ayudar a resolver la inflamación?
En las condiciones respiratorias agudas, contamos con una serie de medicamentos, como los antiinflamatorios y los broncodilatadores, que nos ayudan a mejorar el paso del aire a los pulmones de manera rápida y efectiva.
Además, hoy en día, contamos con estrategias antiinflamatorias que nos ayudan a sanar las vías respiratorias y mantenerlas saludables. Entre ellas podemos mencionar:
- Alimentación saludable: Una dieta balanceada fortalece el sistema inmunitario.
- Descanso adecuado: El sueño reparador es fundamental para la recuperación y el bienestar.
- Ambiente saludable en casa: Minimizar la exposición a alérgenos y agentes tóxicos.
- Ejercicio regular: Mejora la capacidad pulmonar y reduce la inflamación.
- Manejo del estrés y las emociones: Técnicas de relajación y mindfulness pueden ayudar. En mi artículo anterior dejé una técnica de respiración consciente para lograr el bienestar.
- Espiritualidad: La conexión espiritual puede ofrecer apoyo emocional, soy fiel defensora de esto porque soy ejemplo vivo y he sido testigo de los cambios trascendentales que logran las personas al abrazar su ser de forma holística.
Ya hablaré de todos estos temas a profundidad en las próximas entregas.
¿Tienes preguntas o preocupaciones sobre la salud respiratoria de tus hijos? La Dra. Denise Rivera, neumóloga pediátrica, está aquí para ayudarte. Programa una consulta hoy mismo y aprende cómo te ayudo a mejorar la salud respiratoria de tus pequeños.
Contáctanos hoy mismo para agendar tu cita.











0 comentarios